lunes, 8 de junio de 2009

-Me es extrañamente difícil, sin que confusas palabras se agolpen poder explicar, que las noches han cobrado un nuevo y desconocido significado.
Ahora, cuando creía que ya no podía sentir absolutamente nada, solo deseo cerrar los ojos, dejarme llevar y extinguirme en el más profundo de los sueños.
Es entonces cuando la angustia me desborda, es absurdo porque se, que en seguida te encontraré, o no, pues últimamente eres tú, la que me encuentra a mí.
Siempre me horroriza hacerte daño de alguna manera o decir alguna estupidez de las mías y que desaparezcas, te desvanezcas dejándome en este negro vacio que es, la rutina de mis pesadillas.
Tú siempre consigues que todo fluya, logras que olvide mi vulnerabilidad, a tu lado todo se me antoja tan puro, tan fácil y simple…y yo, me siento tan torpemente agradecido.
No sabes cómo logras cautivarme con tu mirada, con tu fantasmal presencia. Tu sonrisa me atrapa, me perturbas y con tu voz, me haces tuyo para siempre.
Pensar que en cualquier instante, tú quisieras, o yo me atreviera a abrazarte, hace que el deseo sea casi insoportable.
Conozco esas sensación y se, que la vida raramente da segundas oportunidades y es entonces, cuando no puedo evitar comparar el momento con la eternidad.
Una corta noche mas y aquí estas, violando mi mente, convirtiendo estos húmedos sueños en inalcanzables. Atormentas todos mis sentidos, dándoles ese calor que tanto necesita un alma. Cada paso que nos acerca, es mucho más de lo que puedo aguantar, cada anhelante suspiro, cada suave caricia, es mucho más de lo que ya nunca podre alcanzar.
Si pudiera suspender el tiempo y retozar perpetuo en este estado catatónico…lo que llegue entonces, todo lo demás, sería un regalo.
Pero eternamente despierto y te evaporas, el vacio y el silencio se apoderan de mí como una fría losa, aún así consigo relajar mi agitada respiración pues se, que la chirriante e irracional maquinaria que es mi mente, no tardara en ponerse a funcionar, para traerte de vuelta.
Por poco que sea, cada noche ocurre más de lo que cualquier persona en su sano juicio, pudiera o quisiera aguantar, desafortunadamente ese no soy yo, últimamente mi “juicio” me tiene desorientado, se burla de mí, me juega malas pasadas y por mucho que duela, siempre te busco (tan inútilmente a veces), por cada rincón de mis sueños.
Y así, una y otra vez te hallo, te deseo y rezo por tener la oportunidad tan solo, de poder rozar tu piel.
Que diferente es la vida real y la soñada, que irónica e imposible es la realidad, pero que fácil es disfrutar, sentir o llorar en este “segundo plano” y que perdedor me siento…si, pero me resigno porque se, que es irremediable, se que te necesito, aunque solo sea un fugaz instante.
Mientras la vida pasa delante de mis ojos cerrados, el devenir de las horas, como un viejo e inservible reloj de arena me recuerda, que queda muy poco para que llegue de nuevo mi momento y sonrío,
quizás hoy, esta noche…consiga un beso tuyo.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario